En un nuevo, y ya casi cotidiano escándalo de corrupción, se ha constituído el contrato No 340 de 2022 celebrado entre el Indersantander y la Corporación Soluciones Técnicas Agropecuarias y Ambientales – Sotea
Dicho contrato pretendió desarrollar e implementar un programa de escuelas de especialización deportiva para niños y niñas del departamento de Santander. El valor del contrato fue por la suma de ($499.999.000 ) cuatrocientos noventa y nueve millones novecientos noventa y nueve mil pesos, es decir, casi 500 millones de pesos. El Indersantander en cabeza del señor Pedro Belén Carrillo suscribió dicho contrato, mediante un proceso de contratación directa con Sotea, una empresa de soluciones agropecuarias y ambientales cuyo representante legal es el ciudadano Lewis Mosquera Hurtado identificado con una cédula expedida en el municipio de Quibdó, Chocó.
El objeto del contrato abarcó por una parte el ofrecimiento de cursos de capacitación a instructores en varias disciplinas deportivas; como la natación, la esgrima, el tenis, el fútbol y taekwondo; y por otra, la adquisición de implementos deportivos tales como balones de fútbol, pelotas y raquetas de tenis, pecheras, canilleras y gusanitos para la natación.
Las serias y vergonzosas irregularidades fueron encontradas en este contrato luego de que algunos profesionales del deporte me contactaran para informar sobre inconsistencias tales como la adquisición de implementos deportivos con costos exagerados tratándose de unos cursos de corta duración y sin ninguna continuidad y sobre todo ante la pregunta ¿Qué hace una entidad contratista en asuntos agropecuarios y ambientales contratando cursos, capacitaciones y dotaciones deportivas?
Fue así como escrudiñando en el desarrollo del contrato encontramos que pelotas de tenis que en el mercado no superan los $ 40.000 pesos fueron facturadas a un costo total de $ 258.000 pesos cada una; que raquetas para la práctica del tenis que tienen un costo promedio de $ 250.000 pesos fueron adquiridas por el Indersantander a un valor de $ 3.870.000,oo pesos; que un balón de fútbol que en el mercado se consigue por un precio inferior a $ 100.000 pesos, resultó siendo facturado en el contrato por una suma de $ 564.000 pesos, es decir, que en solo 15 raquetas de tenis y 120 pelotas los costos alcanzaron los 70 millones de pesos aproximadamente. El total del costo de solo estos implementos deportivos, sumaron aproximadamente 220 millones de pesos, es decir, casi la mitad del total del valor del contrato.
Pero ahí no para la cosa. Los contratantes también establecieron dentro del objeto del contrato unos cursos de capacitación para los profesionales del deporte que debían tomar cada uno en su especialidad, cursos que nunca fueron realizados por el contratista pero que, para sorpresa de los mismos instructores fueron facturados por un monto cercano a los 70 millones de pesos. Adicionalmente el contrato incluyó la contratación de un proceso de juzgamiento deportivo por cerca de 30 millones de pesos que tampoco se realizó pero que al igual que los cursos también fue facturado.
Los profesionales del deporte denunciaron que fueron contratados por montos cercanos a los $3.200.000 pesos y otros por $ 2.800.000 pesos mes, pero que al final de cada pago, todos ellos solo recibieron la suma de $ 2.100.000 pesos.
Informan los profesionales del deporte con quienes pude hablar, que el contrato realmente lo ejecutó un señor llamado Néstor Barajas quien tiene a su cargo otros contratos con el Indersantander, que este señor y el señor Carrillo los citaron para decirles que no se metieran en eso, que estaban en Colombia y que cualquier cosa podría pasar, que esa plata estaba destinada para la próxima campaña electoral y que recibieron ese mensaje como una amenaza.
Lo que afirman varias de las fuentes consultadas para esta publicación es que la realidad del Indersantander es que el señor Pedro Carrillo es solamente “un firmón” y que detrás de él están los verdaderos responsables de tan colosal desfalco de los recursos públicos de la gobernación de Santander.

Lo que sucede en el Inder y en general en esta administración departamental es lo que ha venido sucediendo en nuestro departamento desde tiempo atrás; un saqueo permanente de los recursos públicos, con un modus operandi similar, que por décadas se ha llevado billonarios recursos que podrían haber resuelto problemas como el saneamiento básico y el agua potable de cerca de un millón de habitantes de nuestro territorio.
Espero que los organismos de control y especialmente la Fiscalía General de la Nación, ante quien he procedido a formular la correspondiente denuncia penal investigue y asuma como un propósito detener la andanada de contratos de esta administración departamental que tiene serios indicios de corrupción y que semana tras semana nos pone en el radar nacional como uno de los departamentos más corruptos del país.
Emiro Arias Bueno. Economista y Magister en Ciencia Política
3 comments
Conociendo las “IAS” colombianas no va a pasar nada, solamente nos queda la sanción social, la indignación y votar por personas que realmente piensen en el desarrollo del departamento. Da pesar ver el atraso en el que estamos gracias a esos corruptos qué nos vienen gobernando.
Vienen de la podredumbre de la corrupcion que ha campeado por años en este país, departamento y municipio, no lo pongo en duda ni creo sea un inocente firmón, el es de ellos
Very interesting details you have mentioned, appreciate it for posting.Leadership